Con el Índice de Confianza del Consumidor se intenta medir el optimismo de los consumidores. Se calcula desde el año 1967. Desde el principio su valor inicial ha sido tomado por "100". Este índice se calcula a base de una encuesta mensual de 5 000 familias en la que se trata una serie de cuestiones:
Este índice ejerce la influencia reducida en el mercado, puesto que puede no reflejar el estado real de la economía. Sin embargo, por costumbre se utiliza para pronosticar las tendencias en el campo de ocupación y en el estado de la economía. El aumento de este índice es un factor positivo para el crecimiento de la economía nacional y lleva el crecimiento del precio del dólar.